La medicina parece no tener límites hoy en día, pues lo que antes parecía imposible, los médicos lo hacen realidad casi sin ningún trabajo. La prueba de ello, es un hombre británico a quien le fue colocado un dedo de su pie en la mano izquierda, en reemplazo a un pulgar perdido durante un accidente.
John Byrne de 29 años, tiene ahora en su mano derecha su dedo grande del pie donde antes estaba su pulgar luego de haber perdido su dedo mientras cortaba una pieza de madera.
Al principio los médicos probaron cosiendo su mismo dedo, pero la operación fue inútil pues la sangre nunca fluyó aun con la ultización terapéutica de sanguijuelas. Por lo que sus cirujanos le sugirieron una idea poco común, injertarle parte de su pie.
Para los que tienen la duda, perder un dedo del pie solo trae como consecuencia un poco de problemas con el balance y equilibrio, pero esto es solo mientras el cuerpo se ajusta al nuevo cambio.
Al contrario de lo que muchos podrían pensar, la cirugía ha sido todo un éxito y Byrne muestra su dedo, al que ha apodado “Toby” con mucho orgullo.
Al respecto, Byrne expresó que pensaba que “jamás podría funcionar, pero el equipo de doctores y las enfermeras han hecho un excelente trabajo, el cuidado ha sido fantástico. Todavía no puedo doblarlo, pero espero poder hacerlo pronto, al menos ya gira”. “Es un alivio pensar que pronto podré volver a trabajar”, aseguró.
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