En una estrecha vivienda de unos 25 metros cuadrados, levantada de hojas de Zinc y con piso rústico semidestruido, reside María Feliz Ferreira, de 49 años, su esposo Carlos Feliz Vargas y sus cinco hijos, a poco más de 100 metros de distancia del río Ozama.
0 comentarios:
Publicar un comentario
DEJA TU COMENTARIO JUYE !!!