La mexicana Inés Sánchez, quien según el propio Quezada, estuvo con él “en las buenas y las malas”, ha llevado el caso a una corte, iniciado una batalla legal, pero el dominicano alega a través de sus abogados que a ella, no le toca nada, porque no están casados.
“La señora Sánchez, no tiene derecho al dinero, porque ellos nunca se casaron”, sostiene el abogado de Quezada.
Los defensores de la mexicana, aducen por su lado que Quezada, compró el boleto ganador con parte de los ingresos compartidos entre él y la señora Sánchez.
También compartieron la administración de la bodega que Quezada tenía en Passaic (New Jersey).
Quezada, se presentó el viernes último en la Corte Superior de Paterson, donde se ventila el reclamo de la señora Sánchez. Ella ha pedido al juez congelar las cuentas de Quezada hasta que se decida sobre su petición.
La jueza Margarita María McVeigh, acogió la demanda de la mexicana, pero negó la petición a Sánchez para que se congelen los activos de Quezada a la espera del resultado de una prueba para determinar si tiene derecho a parte del dinero.
La magistrada dijo el viernes, que si bien la relación de la pareja fue de largo plazo y ella y Quezada, constituyeron una familia, la corte no tiene jurisdicción para ordenar la congelación de las cuentas del bodeguero.
La mexicana abandonó la casa que ambos compartía en la ciudad de Clifton y presentó también una querella por violencia doméstica contra Quezada.
El abogado del bodeguero dominicano, declinó comentar sobre esa parte del caso.
La mujer acusa a Quezada de haber enviado una gran parte del dinero a la República Dominicana, un monto de $57 millones de dólares.
Ella dijo también que el agraciado ha regalado $5 millones y que otros $300.000 dólares fueron invertidos en la compra y remodelación de la casa en Clifton, mientras otros $20 millones no se sabe dónde están.
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